Me siento agradecida...



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2 comentarios:

  1. Lo malo es que no toda la gente que cruza la puerta del consultorio o mi cuarto sabe apreciar esa calidad.
    Me quise volver chango cuando la gente de mi rancho de servicio social le hizo el feo a mis rosas, violetas y citricos por mas que alternaba las fragancias.

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    1. Hola, Eduardo! Bienvenido a este espacio!
      Es que no todos tenemos la misma sensibilidad. Yo tuve que educar mi olfato porque al principio solo me llegaba un desagradable olor a madera quemada... Ademas, el efecto del humo no todos lo reciben bien.

      Puedes probar con esencias mas suaves. La lavanda, por ejemplo, suele gustar a todo el mundo.
      Tambien puedes "acostumbrarlos" poniendo primero otros aromatizadores, como esas mezclas que hay de birutas de madera y otros elementos naturales, que ya vienen perfumadas. Un poquito de esa mezcla en un pequeño bowl o un simple vaso de cristal sobre el escritorio aporta un aroma sutil y ademas es decorativo.
      Ya que esten acostumbrados puedes ir variando las esencias y los aromatizadores hasta que llegues a los palillos de incienso.
      Saludos!

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